Lamentablemente el Lyme en el continente Europeo, Asiático y en los Estados Unidos ha tenido una fuerte incidencia. Esto provoca que la población se alarme debido a que la mayoría no conoce sobre la enfermedad de Lyme. Algunos deportistas han visto su carrera afectada por ella.
La causa de esta patología infecciosa son las bacterias Borrelia burgdorferi y Borrelia mayonii. Estas bacterias son portadas por la garrapata de venado y la garrapata de patas negras. Sin embargo las pulgas, mosquitos u otros insectos que estén infectados también pueden ser portadores de dichas bacterias.
Para poder contraer Lyme la garrapata debe estar infectada y debe durar entre 36 a 48 horas adheridas a la piel para transportar la bacteria. Puesto que primero llega a la piel a través de la picadura y posteriormente entra al torrente sanguíneo.
El primer signo de esta enfermedad es el Eritema, es decir, como especie de un sarpullido que posteriormente puede llegar a viajar a otras zonas del cuerpo. Este Eritema puede llegar hasta 30cm de ancho apareciendo primero en la zona de la picadura y luego suele viajar a ciertas zonas del cuerpo como los muslos o las axilas.
Etapas de la enfermedad de Lyme
El Lyme está clasificado en tres etapas; el precoz, el de diseminación temprana y el crónico. Por ende sus síntomas van a variar según la etapa en la que se encuentre el paciente.
En la etapa precoz la persona tendrá síntomas muy similares al de una gripa tales como, dolor de cabeza, escalofríos, dolor muscular entre otros. Si la enfermedad se detecta en esta fase se procederá a eliminar la bacteria con antibióticos.
Si no se cómbate la enfermedad a tiempo y llega a la etapa de diseminación temprana las consecuencias pueden ser graves. En esta fase el paciente presentara alteraciones cardiacas, problemas neurológicos, dolor o entumecimiento en algunas extremidades, entre otros.
En la etapa crónica el paciente puede sufrir consecuencias que pueden ser irreparables como por ejemplo; fatiga extrema, pérdida de memoria a corto plazo, dificultad para coordinar movimientos, problemas cardiacos e incluso problemas psiquiátricos.
Lamentablemente no existe una cura para el Lyme en sus dos últimas fases. Puesto que si no se detecta a tiempo la bacteria llega a afectar órganos importantes o a causar daños irreparables como lo es la pérdida de memoria a corto plazo.
Sin embargo con el pasar de los años los expertos han logrado conseguir la manera de aliviar algunos síntomas. El tratamiento Lyme lo realizan en tres fases; iniciación terapéutica, tratamiento de choque y tratamiento en casa.
¿Cómo prevenir la enfermedad de Lyme?
No en todos los casos se puede prevenir esta enfermedad, pero si nos podemos proteger de las picaduras de garrapatas. Sobre todo las personas que viven en zonas endémicas o las que van de vacaciones a lugares donde abunden garrapatas.
Las ninfas de garrapatas de venado y garrapatas de patas negras que atacan al ser humano son muy pequeñas y difíciles de ver. Por lo tanto es de suma importancia tomar las precauciones necesarias para evitar sus picaduras; algunas de las prevenciones recomendadas por expertos son:
- Caminar por el centro de sendas, en vez de hacerlo entre la maleza alta o los arboles del bosque
- Llevar puesto camisas manga larga, botas o zapatos cerrados y pantalones largos
- Se recomienda meter los pantalones dentro de las botas o medias
- Aplicar repelente contra insectos, uno de los más recomendados por expertos es el dietiltoluamida (DEET)
- Algunos médicos recomiendan lavar la ropa o la indumentaria con permetrina con la finalidad de repeler las garrapatas
- Llevar ropa de color con el fin de detectar fácilmente la garrapata
- Después de haber pasado mucho tiempo en el aire libre se recomienda una ducha completa
- Extraer la garrapata inmediatamente después de ser detectada
Conoce la experiencia de Kisrten Sweetland y el Lyme
Kisrten Sweetland era una triatleta que tenía una vida llena de éxitos en el triatlón canadiense, hasta que fue víctima de la picada de una garrapata. Esta grave enfermedad la llevo a retirarse de su carrera deportiva a los 28 años de edad. Solía hacer sus entrenamientos en una zona boscosa y allí fue donde contrajo la enfermedad de Lyme.
La canadiense intentó seguir en el triatlón con la enfermedad, pero no fue posible. Afirma que afectó tanto su cerebro y su sistema nervioso, causándole una fatiga que no la dejaba llevar una vida activa. Además, algunas veces sus extremidades se sentían entumecidas, junto con la presión arterial baja y falta de oxígeno, lo cual era de lo peor para ella.
La experiencia de esta chica es un claro aviso para aquellos que practican o hacen algún deporte en áreas boscosas. Se deben conocer los riesgos y tomar las precauciones necesarias para evitar el contagio de esta enfermedad tan grave.